La familia de la estrella del fútbol Katie Meyer presenta una demanda por homicidio culposo contra la Universidad de Stanford
Lacie Hull #24 del Stanford Cardinal usa las letras KM en su muñeca en honor a la jugadora de fútbol de Stanford Katie Meyer durante la primera mitad contra los Texas Longhorns en el Torneo de Baloncesto Femenino de la NCAA Elite 8 Round en Spokane Veterans Memorial Arena el 27 de marzo de 2022 en Spokane, Washington. Meyer falleció a principios de 2022. (Foto de Abbie Parr/Getty Images)
La familia de Katie Meyer, una destacada jugadora de fútbol que se suicidó la primavera pasada, presentó una demanda por homicidio culposo contra la Universidad de Stanford y varios administradores alegando que sus acciones en torno a una posible acción disciplinaria “causaron que Katie sufriera un reacción de estrés agudo que la llevó impulsivamente al suicidio”.
Poco antes de su muerte, Meyer enfrentó repercusiones después de defender a un compañero de equipo en el campus, dijeron sus padres en los días posteriores a su suicidio.
“Las acciones que llevaron a la muerte de Katie Meyer comenzaron y terminaron en la Universidad de Stanford”, alega la demanda.
“La comunidad de Stanford sigue afligida por la trágica muerte de Katie y nos solidarizamos con su familia por el dolor inimaginable que les ha causado la muerte de Katie. Sin embargo, estamos totalmente en desacuerdo con cualquier afirmación de que la universidad es responsable de su muerte”, dijo a CNN el portavoz de la universidad, Dee Mostofi, en un comunicado. “Si bien aún no hemos visto la denuncia formal presentada por la familia Meyer, somos conscientes de algunas de las acusaciones hechas en la presentación, que son falsas y engañosas”.
La demanda incluye detalles de las alegaciones que desencadenaron la posible acción disciplinaria, que se hicieron públicas por primera vez, explicando que, mientras montaba en bicicleta en agosto de 2021, Meyer supuestamente derramó café sobre un jugador de fútbol americano que presuntamente agredió sexualmente a uno de sus compañeros menores.
Según la demanda, Meyer recibió una carta formal de cargo de la universidad por correo electrónico después del horario de atención de la OCS informándole de una acción disciplinaria inminente la noche de su muerte, exactamente seis meses después del incidente del café derramado.
“Estamos profundamente preocupados y decepcionados con lo que hemos aprendido desde su fallecimiento y no tenemos más remedio que seguir adelante con el litigio para lograr justicia para Katie y proteger a los futuros estudiantes”, dijo la familia Meyer en un comunicado.
La noche de su suicidio, Meyer recibió una carta de la Oficina de Estándares Comunitarios (OCS) de Stanford que “contenía lenguaje amenazante sobre sanciones y posible ‘expulsión de la universidad’”, alega la denuncia. “La carta de acusación disciplinaria formal relacionada con el café derramado también le informó a Katie que su diploma estaba en suspenso solo tres (3) meses antes de su graduación; amenazando su condición de estudiante de Stanford, capitana y miembro del equipo de fútbol, asesora residencial, becaria de Mayfield, becaria innovadora de defensa y su capacidad para asistir a la facultad de derecho de Stanford, entre muchas otras cosas”.
Meyer respondió inmediatamente al correo electrónico diciéndole a la Oficina de Estándares Comunitarios de la universidad que estaba “conmocionada y angustiada” por la acción, afirma la demanda.
“Los empleados de Stanford no apoyaron a Katie cuando expresó sentimientos de desesperación, estaba ‘aterrorizada de que un accidente destruyera mi futuro’, y había ‘temido durante meses que mi torpeza arruinara mis posibilidades de dejar Stanford por un buena nota’, y experimentando mucha ‘ansiedad’ relacionada con el Proceso OCS”, afirma además la demanda.
Según Mostofi, el vocero de la universidad, la carta a Meyer también contenía “un número para llamar para apoyo inmediato y se le dijo específicamente que este recurso estaba disponible para ella las 24 horas del día, los siete días de la semana”.
Mostofi agregó: “Es importante enfatizar que estamos comprometidos a apoyar a los estudiantes a través del proceso judicial estudiantil bajo OCS, y así lo hicimos en este caso. En particular, la universidad le ofreció a Katie un asesor para que trabajara con ella durante todo el proceso y le dijo que podía contar con una persona de apoyo de su elección en cualquier reunión o conversación con OCS”.
Al señalar que Meyer no tenía antecedentes de enfermedad mental, la demanda detalla los planes que había hecho en los días previos a su muerte, incluida la compra de boletos de avión, la planificación de una fiesta de cumpleaños y la asistencia a clases y prácticas de fútbol con normalidad.
Si tú o un ser querido ha contemplado el suicidio, llama al 988 para comunicarse con la Línea Nacional de Prevención del Suicidio. Brinda apoyo gratuito y confidencial las 24 horas del día, los siete días de la semana para personas en crisis o angustia suicida. Para apoyo de crisis en español, llame al 1-888-628-9454. La Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio y Befrienders Worldwide también brindan información de contacto para centros de crisis en todo el mundo.